¿Qué es el acoso?
Cualquier comportamiento verbal, no verbal o físico, de naturaleza sexual y no deseado ni solicitado por la persona que lo recibe que tenga el propósito o produzca el efecto de atentar contra la dignidad de una persona, afectando su integridad física o psicológica, en particular cuando se crea un entorno intimidatorio, degradante u ofensivo.
Conductas que pueden constituir el acoso sexual
- Insinuaciones sexuales, proposiciones, presión o chantaje sexual, o flirteos ofensivos.
- Comentarios obscenos, bromas u observaciones sobre la apariencia sexual de una persona.
- Llamadas telefónicas, mensajes de correo o redes sociales de carácter ofensivo y con claro contenido sexual.
- Contacto físico deliberado y innecesario tales como tocamientos, roces, besos, palmadas o pellizcos
- Acercamiento Físico innecesario y excesivo
- Búsqueda reiterada o forzada de encuentros a solas con la persona fuera de horarios escolares o laborales (poco rutinarios)
ES ACOSO POR RAZÓN DE SEXO:
Si de forma reiterativa por ser mujer o por circunstancias de embarazo, maternidad, lactancia natural, o por ejercer las funciones paternales /maternales y otras funciones o tareas relacionadas con el rol atribuido a las mujeres:
¿Qué hacer si estás sufriendo acoso?
Tramita una queja en tu empresa a través del canal de denuncias previsto en el protocolo para la prevención del acoso sexual y acoso por razón de sexo.
Es recomendable que compartas con personas próximas la situación que estás viviendo, que acumules pruebas (correos electrónicos, WhatsApp, grabaciones de voz, llamadas, vídeos, etc.) para denunciar y que lleves un registro de los hechos ( día y hora) y posibles testigos.